SEXAGÉSIMO QUINTO ANIVERSARIO DE LA FUNDACIÓN DR. ANTONIO NORES
Hoy, al cumplir años, el Consejo de Administración saluda a la Comunidad Educativa e invita a una reflexión.
La historia de la Fundación, es la del Colegio, de los distintos niveles, comenzando por los dos primeros (el colegio Primario y el Instituto Secundario) que el año próximo cumplirán sus 65 años de vida. El 11 de mayo cumplió 60 años el Nivel Inicial, el Jardín de Infantes «Pulgarcito». El mas novel de todos, es el Instituto Superior de Formación Docente Dr. Antonio Nores.
En el segundo párrafo del acta de creación de la fundación establece que son fines de la institución: «Crear y dotar una fundación para la formación cultural que tendrá como fin educar en el orden primario, secundario, técnico, etc., a la niñez y juventud del medio, conforme a los principios cristianos y de acuerdo a lo establecido en el artículo catorce de la Constitución Nacional».
El artículo 3° de los Estatutos precisa, aún más el cometido, al decir que “Son fines de la Institución, la formación integral y armónica del educando en el orden intelectual, moral y físico.
- a) En el orden intelectual, impartirá enseñanza primaria y media en las distintas ramas que sea factible efectuar: Bachiller, Magisterio, Comercial, Industrial, etc., y Superior; especialización técnica, profesorado normal, etc. Podrá estar incorporado a los institutos de Enseñanza Primaria, Media, Técnica y Universitaria, Oficiales y Privados. Podrá acogerse a los beneficios de la Ley 14.557 o a cualquier nueva ley de enseñanza libre que en los órdenes primarios, secundarios, superiores se dictase. Complementara la enseñanza con clases, cursos, conferencias formativas de humanismo, cultura general y orientación profesional. Propenderá a su vez a la extensión cultural del medio en sí. Propiciará la formación democrática de los estudiantes dentro de los principios que emanan de la Constitución Nacional y desarrollará sus actividades en consonancia con las instituciones republicanas y democráticas del país.
- b) En el orden espiritual: se encauzará su formación dentro de la doctrina de la Iglesia Católica Apostólica Romana. Formará al educando, moral e intelectualmente apto para la vida y por ende a la sociedad desde una concepción filosófica cristiana.
- c) En el orden físico: propenderá a la educación física del estudiante, mediante clases, competencias, y prácticas de deportes tendientes al desarrollo armónico del cuerpo mediante el aprovechamiento de sus aptitudes naturales”.
Tiene, en consecuencia, la finalidad inalterable de educar conforme a los principios cristianos, según el magisterio de la Iglesia Católica Apostólica Romana y además, alcanzar la formación democrática de los estudiantes dentro de los principios que emanan de la Constitución Nacional. La Fundación no sólo porque lo que lo manda expresamente el Estatuto, sino porque lo impone la pertenencia a la Nación Argentina, debe desarrollar sus actividades en consonancia con las instituciones republicanas y democráticas del país.
El Instituto Dr. Antonio Nores es una obra de laicos para la Iglesia dentro de la parroquia. Lo establecen los estatutos, al definir su carácter parroquial, de la siguiente forma:
Art. 39º.- El Instituto Dr. Antonio Nores creado y sostenido por la Fundación, tiene carácter parroquial:
- a) Por su orientación católica y porque desarrolla su acción de educar cristianamente a la niñez y juventud.
- b) Porque si bien no depende en particular de ninguna parroquia de su zona de influencia, debiendo mantener con las mimas relaciones de mutua colaboración y consejo, la formación espiritual de los educandos estará fundamentalmente vinculada a la Parroquia de Nuestra Señora de la Sallette de la Diócesis del Arzobispado de Córdoba.
- c) El Colegio Dr. Antonio Nores, como los institutos que en el futuro se crearen, reflejaran el mensaje de caridad cristiana tal como lo enseña la Santa Madre Iglesia, no pudiendo variarse esta orientación, ni apartarse de las directivas pastorales del Ordinario de la Diócesis.
- d) Queda definido el carácter parroquial por estas y demás normas que emanen del asesoramiento, consulta y dependencia con la jerarquía eclesiástica.
En más de una ocasión, se ha hecho referencia al carácter confesional de la institución. En el momento de creación de la fundación, existían normas en el derecho canónigo que establecían los requisitos para que una escuela sea considerada católica que se cumplieron estrictamente, al punto que acompañaron los primeros pasos, Monseñor Horacio Gómez Dávila que luego, al ser designado Obispo Diocesano de La Rioja, dejó su lugar a Monseñor Enrique Angelelli, y el Párroco de Nuestra Señora de La Sallette, P. Luis Sawiza.
Un documento del Concilio Vaticano II, posterior a la creación de la fundación, enuncia con claridad la misión de una escuela católica, en el mismo sentido que lo hacen los documentos liminares y permanentes de nuestra institución.
En efecto, en su declaración, el Concilio ofreció algunos “principios fundamentales” entendiendo que la educación, como formación de la persona humana, es un derecho universal: “Todos los hombres, de cualquier raza, condición y edad, en cuanto participantes de la dignidad de la persona, tienen el derecho inalienable de una educación, que responda al propio fin, al propio carácter, al diferente sexo, y que sea conforme a la cultura y a las tradiciones patrias, y, al mismo tiempo, esté abierta a las relaciones fraternas con otros pueblos a fin de fomentar en la tierra la verdadera unidad y la paz. Mas la verdadera educación se propone la formación de la persona humana en orden a su fin último y al bien de las varias sociedades, de las que el hombre es miembro y de cuyas responsabilidades deberá tomar parte una vez llegado a la madurez” [Concilio Vaticano II, Declaración sobre la educación cristiana Gravissimum educationis, 28 de octubre de 1965, Proemio, citado por el documento de la Congregación para la Educación Católica, denominado «La identidad de la Escuela Católica (2015).
El espíritu de los fundadores y la gente que acompañó la creación de la institución, fue de carácter apostólico. Se creó una institución con el espíritu de una comunidad generadora de un ambiente escolar, animado por el espíritu evangélico de libertad y de caridad (según señala el documento que acabo de citar). La fundación fue y es una obra de laicos, dentro de la Iglesia, integradas al trabajo por espíritu solidario.
Estas ideas fuerzas, fueron las que animaron a la institución y que provocaron, su desarrollo sin pausas y consolidación.
El Consejo de Administración de la Fundación Dr. Antonio Nores, en este 20 de mayo de 2024, agradece a la Comunidad Educativa su aporte y colaboración para alcanzar los fines de la institución, en especial a los directivos y docentes de todos los niveles, al personal administrativo y a los que ayudan a que se lleve a cabo la noble obra que ha alcanzado un amplio reconocimiento de la sociedad.
Agradece a las familias, a todas, a las de antes, y a las de ahora, que confiaron a sus hijos para que con ternura fueran recibidos y acompañados por nuestros abnegados docentes.
Consejo de Administración la Fundación Dr. Antonio Nores
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